sábado, 9 de agosto de 2008

ALEXEI EL RUSO


CLON BUKOVSKIANO DE MALA MUERTE




Mi amigo Alexei el ruso, es un borracho al que Chenaski (el Personaje de Bukovski) viviría pendenciándolo. Vodka, es su bebida preferida, pero en realidad no tiene porque hacerle asco a nada de alta graduación alcohólica. Lo más llamativo es que siendo un hombre de bajo umbral para el alcohol siempre anda con mujeres de muy buen traste, cara bonita y ni que hablar de los pechos.
Un tipo con suerte. Alexei, me invita esa noche a una disco cerca del Paseo de la Infanta, en los Bosques de Palermo, espantando gay y travestis que andan por el Rosedal, llegamos a la disco entre empujones y tarjetas VIP, que no sirven en la entrada. Pero Alexei se abrazo a un gorila de la puerta que le franqueo la entrada y nos hizo pasar al VIP de una. Un trago siguió al otro, y que mujeres, mi dios, que cosas vi. Por todos los infiernos. Cuando Alexei considero que el vaso era chico pidió la botella y como un bárbaro se la dejo chorrear por la boca, sabiendo ya que mi amigo jamás respondería cuando lo llamara por su nombre. Allí quede impactado. Una morocha nívea, con tela de plástico brilloso bien ajustado a cuerpo, con cadenas y una capa gótica se acerco a Alexei y empezó a bailar sensualmente. No lo podía creer, mi amigo, casi sin poder sostener el equilibro y la mujer más bella de toda la disco abrazados comiéndose la boca a besos. Luego los vi partir, aunque nada de lo que hicieran podría ruborizar a los presentes por las acciones que hicieran juntos creo que semejante mujer buscaba algo más de privacidad para dar rienda suelta a sus juegos. Por el medio día. Voy hasta la casa de Alexei, y lo encuentro aun durmiendo el sueño con resaca del alcohol turbio de la bebida blanca, y me doy cuenta que la mujer se ha ido. Cuando le pregunto por ella no sabe nada. Te ha robado le digo, te ha robado, pues esta toda su ropa en la silla y ella no está en toda el departamento. Alexei se tomaba la cabeza pero no reaccionaba, Ahí fue donde me di cuenta de lo que había sucedido, lo increíble de cómo a veces sin quererlo la inmortalidad puede jugarle una mala pasada. Sobre el cuello de Alexei, un sutil mordida de Vampiro, y al final de la cama un poco de cenizas que supe que eran los restos de ella. El vampirismo suele ser algo increíble, pero estaba ante mis ojos las huellas inconfundibles de lo que había sucedido. Ella hermosísima vampira, había sucumbido al tiempo. Llego a borde mismo de la madrugada disfrutando del amor, cuando decidió hincar los dientes en la yugular de Alexei. La graduación alcohólica en la sangre de mi amigo era tan alta, pero tan alta, que la embriaguez de los primeros sorbos sumió al vampiro mujer en un sueño que le hizo perder la noción del tiempo. Dormida, los primeros rayos de sol dieron sobre su piel. El resto es posible deducirlo. Alexei ni se dio cuenta. Yo entendí mal todo hasta que no pude recomponer lo sucedido. No hice ningún comentario. Quien me creería una historia de Vampiros.

Publicado por LoTrunco en 6:59 |  

0 comentarios:

Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)